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viernes, 7 de febrero de 2014

compartir es vivir

La Tierra...la Madre de todos los terrícolas que vivimos juntos, los que respiramos el mismo aire, los que bebemos el mismo agua y los que aspiramos a vivir en Paz y Armonía con el Mundo. No es un sueño, es una visión...una visión compartida por millones de Seres Humanos en todas partes del Mundo...vivir en Paz y Armonía, amando a los demás. Eso no es un sueño...Es una realidad que viene a nosotros...

Hoy en día, realidad significa cambio...romper las reglas obsoletas, desmontar las bases de una sociedad que está condenada a la autodestrucción. Hoy es tiempo de poner un punto final al absurdo de nuestros modos de vida. Todos somos uno y todos estamos unidos. No importan nuestras acciones, nuestros pensamientos, tenemos un impacto sobre la tierra, sobre los humanos, sobre la naturaleza. La tierra es un diamante de perfección donde todo funciona en ciclo: el ciclo de la vida.
El ciclo del agua que viene de los océanos, que se desala en las nubes para luego irrigar las tierras, que se filtra a través de los suelos para dar vida a los terrícolas y luego regresar a los océanos...un ciclo perfecto...la naturaleza es perfecta...armoniosa...lo único que tenemos que hacer es vivir como ella nos enseña, en armonía y dejándose llevar con el viento.

Hay obstáculos en el camino hacia la armonia pero con un poco de reflexion, todo parece simple. Nuestro sistema entero está enfermo, perdido en una locura centenaria que alimenta su propia destrucción. Sin embargo, tenemos todo lo que necesitamos. La naturaleza nos enseña cómo vivir, cómo confiar en nuestros instintos, en nuestros sentimientos. La naturaleza humana es buena y generosa como la naturaleza, que sólo quiere dar. Todos tenemos amor dentro de nuestros corazones y sólo las distracciones de nuestros tiempos modernos nos impiden escucharlo. Pero esta ahí, profundo, tenemos que aprender a escuchar a nuestra voz interior para que nos guíe en la dirección justa. La naturaleza nos ofrece todos sus frutos esperando sólo que los compartamos entre todos y que respetemos el árbol que nos lo da. 

Hay obstáculos y  todos están conectados. Guerras que destruyen nuestra tierra se tratan todas de lo mismo, el control de los recursos (petróleo, diamantes, oro...tierras fértiles) ; el hambre es una realidad creada, es consecuencia de la apropiacion de las tierras por una minoría que se enriquece siempre más; las fracturas sociales, la esclavitud moderna, el trabajo infantil...son los resultados de la avaricia de las industrias que buscan siempre obtener más; la contaminación y la destrucción de nuestro Planeta está causada por la falta de respecto del ser humano para su propia madre, Como si cortara la mano que le alimenta...y todo eso para tener  más...más dinero(algo que nadie se lleva cuando muere) 

El dinero y todo lo que representa es la gangrena que destruye nuestro Mundo, nuestra propia natura. El dinero fue inventado por comodidad en tiempos atrasados cuando la esclavitud, el sufrimiento y las matanzas fueron cosas normales. El dinero alejó al Ser Humano de los principios inherente a la naturaleza, dar y compartir. Sin embargo, creemos en la naturaleza humana. No fuimos creados para ser más ricos o para poseer más, no hemos nacido para ser mejor que el otro o querer controlarlo. Venimos a este Mundo como seres puros con ganas de vivir felices con Amor y Armonía. Todos,en la profundidad de nuestros corazones, cuando cerramos los ojos, cuando abrazamos, sonreimos y compartimos, podemos sentir amor.

Es tiempo de dejar esta sociedad enferma, de abandonar todas estas distracciones que sólo nos dan satisfacciones superficiales y nos alejan de la verdadera felicidad. Es tiempo de pensar de una nueva manera, dejar los vicios del dinero y aprender de nuevo a dar y compartir con nuestros hermanos y hermanas terrícolas lo que la tierra nos ofrece. Tenemos todo lo que necesitamos, comida para los hambrientos, agua para los sedientos, abrigos para los sin-techos, paz para los agitados...y amor para todos. Vivir es compartir. Compartir es todo

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